LA TELARAÑA: El limbo y el purgatorio

viernes, abril 13

El limbo y el purgatorio

La Telaraña en El Mundo.

Están el cielo y el infierno, que son lugares muy hogareños, pero también el limbo y el purgatorio que nos permiten, en cambio, más licencias y hasta metáforas, porque sobre ellos recaen serias dudas, incluso sobre su existencia. Dudas teológicas, por supuesto, porque nadie conoce esos lugares; ni siquiera viviendo en uno de ellos. O en ambos.
Y es que, a veces, no hay forma de discernirlos. La ciudadanía, en general, se sabe en pleno purgatorio, soportando penas y suplicios, purificándose para un futuro idílico, expiando culpas que ignora, de hecho, si son propias o ajenas. Y es, en esa ignorancia, donde acaba sospechando hallarse, también, en el limbo de las vanidades, los patriarcas corruptos y la traición de la inocencia. En un lugar donde nada atiende a razones y todo es tan absurdo como voluble.
Nos asaltan, pues, las dudas sobre quiénes nos manejan, con sus caprichos, desde ese lugar mítico. Y pensamos en el mercado, la prima de riesgo, la deuda, el déficit y los políticos. Sí, pero en cuáles. ¿Los europeos, nacionales, autonómicos o locales? En todos, porque tanto derroche autonómico a la carta y tanto artificio administrativo no hacen sino ceñir nuestras vidas a la precaria arquitectura de los círculos alrededor del infierno de Dante o, quizá, de Milton. De hecho, nos arrojan sin remisión a sus llamas; y del averno, ay, me temo que no hay escapatoria.

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2 Comments:

Blogger Luis Amézaga said...

La arquitectura del sistema político ha crecido a costa de la habitabilidad del resto de ciudadanía. Mi pregunta es: ¿si no tocamos fondo es imposible empezar a subir? ¿No hay manera de evitarnos alguna penalidad?

13 de abril de 2012, 12:20  
Blogger Juan Planas Bennásar said...

No lo sé, Luis... la verdad es esa :-(

13 de abril de 2012, 22:07  

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