LA TELARAÑA: La fauna prohibicionista

viernes, diciembre 17

La fauna prohibicionista

La Telaraña en El Mundo.


No sé si Josep Oliver, presidente de la CAEB, habrá pecado de optimista al situar la salida de la crisis en los cielos remotos de 2014. Casi deseo que acierte en su augurio porque, pese al silencio de Paco Rabanne, la verdad es que ya urge poner en solfa el cúmulo de profetas que, amparándose en textos mayas o de Parravicini, los códigos secretos de la Biblia, Nostradamus, los apuntes de la NASA sobre tormentas solares, la órbita enloquecida del Hercólubus y no pocos desastres más -estado de alarma nacional y brote de hongos mefíticos en Son Espases, incluidos-, cifran el fin del Mundo para el año 2012.

Es cierto que semejante apocalipsis acabaría, de paso, con la crisis, pero no creo que la CAEB esté pensando en ese tipo de salida. En realidad, y siendo pragmáticos, hasta que Wikileaks no nos avance algo significativo sobre el tema -algo que ya no sepamos, quiero decir-, lo mejor será olvidarse de las hecatombes y perseverar en el empeño de levantarse cada día como si fuera, no el último, sino el primero. No es fácil, lo sé, pero bueno.

Nunca he creído que las horas estuvieran contadas. Al revés, sólo las cuentan los contables de la exclusión y el estupor ajenos. El Govern de Antich, por ejemplo, que le ha cogido el resabio amargo a las multas lingüísticas. Y a cobrarlas. O la fauna prohibicionista que dice leerme -o no- tan sólo para enviarme correos anónimos. De mal gusto, claro.

Etiquetas: